
Llamemos las cosas por su nombre, y esto se llama Yoduro de plata, deshace las tormentas y evita la lluvia.
El cambio climatico es una realidad, tal y como lo ha sido durante todo el periodo de vida de nuestro magnífico planeta tierra.
Aunque, nada tiene que ver con la controlada pluviometria que desde hace màs de quince años se experimenta desde la universitat de Lleida y que tan poco se habla y se conoce.
Parece ser que como de costumbre impera el interes económico por encima del bienestar natural y general de la población. Sanciones ridiculas y a medida al alcance de cuatro ricos que someten al resto, meramente por un interes ilegitimo camuflado con un sutil velo llamado cambio climatico.
Tormentas torrenciales, grandes colapsos y desvordamientos son gran parte derivados por la mala praxis de cuatro compañias, tuteladas y consentidas por un sistema caduco, inoperativo e ineficaz, pese a quien le pese, los datos estan ahí para quien realmente los quiera ver.
El ser humano se extinguirá una vez màs gracias a su propia estupidez.